La combinación perfecta
«La combinación perfecta.Esta mañana después de hacer nuestra caminata, Berend empieza a soñar y a fantasiar que vamos hacer para almorzar hoy.
Y me empieza a decir porque no combinamos lo mejor de México con lo mejor de Holanda. Y le dije perfecto, y le pregunto y que viene a tu mente y me dijo va hacer sorpresa.Bueno, bueno que será y yo me olvidé por un par de horas de su comentario.La verdad yo estaba muy atenta a la conversación de uno de nuestros clientes Era un especialista en acupuntura China y estábamos conversando de cómo ayudaron a muchas personas después del terremoto. Describían a detalle todo lo que vivieron, sentía como si estuviera con ellos y ya casi con ganas de poner agujas yo también.
Todo lo de Asia me llama mucho la atención. Tuve la oportunidad de vivir en China, Singapur y Vietnam. También pasé varios meses en Japón, Tailandia y Malasia. Y como me encantan los masajes de pies Chinos.
Cuando salía muy cansada del trabajo antes de ir a casa llegaba a darme un masaje. Tenía una Chinita que me los hacia todo el tiempo. Le dejaba su buena propina para que me atendiera mejor cada vez.
Cuando entraba al negocio, la Chinita corría a la puerta para que ninguna otra persona me ayudarán.
Era muy lindo ver cómo se desvivía por mi y éstaba chimuela pero esa sonrisa de oreja a oreja hacia que se viera aún más bonita.
Los masajes son toda una tradición en Asia y en la China son divinos pero con muchos pasos.
Primero tienes que elegir tu silla preferida. A mí me gustaba sentarme hasta el final, me sentía que era un lugar más tranquilo.
Una vez que te sientas cómoda, me traían unas toallas calientes para limpiar mis manos. Aún recuerdo su aroma era Jazmín. Y después me servían una taza de té verde. De esos té que se disfrutan y te transportan a otros mundos. Bueno soy muy soñadora y yo con una buena taza de té puedo hasta subirme en un tapete mágico recorriendo el mundo.
Una vez que le daba el segundo sorbete, la chica me traía el menú todo en Chino y me pedía que eligiera. Poco a poco fui descubriendo lo que pedía, jajaja todo era Chino y yo solo decía en mi mente de Tin Marín, de do pingue y elegía. Soy muy aventurada y no me asusta casi nada así que era todo un juego lo que elegía y todos los empleados y clientes se reían de mi juego de azar y todos querían saber que me tocaba. Aveces unas señoras decían no, y yo elegía nuevamente. Era muy divertido mi juego. El solo hecho de hacerlo y ver sus caras valía el costo del servicio.Después se iba la chica a un cuartito y llegaba con una balsa de madera muy mona con agua muy caliente. Pero antes de que pusiera mis pies en la balsa me limpiaba mis piernas y pies con mucho entusiasmo, como que mis pies fuera el objeto más preciado que ella haya tenido. Me sentía muy tranquila y me encantaba observarla como hacía su trabajo con tanta devoción.
Una vez terminado este paso ella agregaba los polvos mágicos, y lo eran porque era parte del menú que yo elegía al azar.
Muchas veces elegía olor a rosas y otras a Jazmín. El Jazmín era mi preferido.
Una vez que los polvos mágicos se revolvían bien ella me hacía señas para que sumergirá mis pies en la balsa.
Y unos minutos después empezaba el massage.
Sacaba una pierna primera, le untaba crema que yo llevaba y empezaba. Ese momento que ella tocaba mis pies y empezaba por los dedos de los pies cada uno que aveces me estremecía y otras me hacía llorar, pero eran lágrimas de felicidad me estaba removiendo todo el estrés acumulado.
Que días los míos, que recuerdos inolvidables. Creo que no vuelto a encontrar a alguien que con su sonrisa y sus potentes manos me quitara el estrés en una hora.Y yo soñando con la China y llega Berend y me dice. La combinación perfecta es quesadillas con queso Gouda, Holandés por supuesto. Y aguacate con frijoles. ¡Mi vida! Si es la combinación perfecta. Y en eso se escucha que abre dos cervezas bien frías.Colorín colorado este cuento se ha acabado. Hasta la próxima».
Adrianabebig
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