Frase 39

Hay días en los que la vida se siente como un libro abierto en la mitad del capítulo. No vemos el final, no entendemos cada giro, no tenemos pistas de lo que sigue.
Y aun así, en ese espacio misterioso, existe un poder inmenso: el poder de confiar.
No se trata de negar lo que sentimos o de fingir valentía. Se trata de reconocer que, aunque no sabemos qué viene, nuestra alma puede sostenerse en algo más grande que el control: la fe, la esperanza, la gratitud.
Porque agradecer sin garantías es una de las formas más elevadas de amor propio.
Es abrazar la vida sin exigirle explicaciones.
Es permitir que el corazón se mantenga abierto, incluso cuando el miedo quiere cerrarlo.
Hay milagros que no llegan con ruido.
Hay milagros que se están formando en silencio mientras tú respiras.
Hay milagros que ya caminan hacia ti, aunque tus ojos todavía no los vean.
Agradecer por adelantado no es ingenuidad: es sabiduría espiritual.
Es comprender que la vida no siempre se entiende desde la mente, sino desde el alma.
Cuando eliges confiar, tu energía cambia.
Cuando eliges agradecer, tu frecuencia se eleva.
Cuando eliges mantenerte abierta, la vida encuentra la forma de llegar a ti.
✨ Hoy no sé qué viene, pero confío y agradezco como si ya fuera un milagro.
Tal vez hoy necesites un abrazo, una señal, una respuesta, una buena noticia.
Tal vez hoy estés esperando algo que tu corazón anhela con fuerza.
Y está bien.
Permítete sentirlo.
Permítete esperar.
Permítete creer.
Mientras tanto, recuerda: la vida nunca deja de moverse a tu favor.
A veces el milagro no es lo que llega…
a veces el milagro es quién te conviertes mientras esperas.
Soy Adriana BeBig tu Mentora de Liderazgo Consciente.
PS. Agradecemos profundamente a nuestro angelito, Nina Talabani, quien ayer nos tendió su mano en el tren y nos permitió completar nuestro trayecto para regresar a casa. Cuando parecía imposible llegar a nuestro destino final, el camino nos regaló el encuentro con una mujer extraordinaria, a quien, junto con su esposo, llevamos en el corazón con inmensa gratitud.
