Mis 60 años
Hoy es mi cumpleaños 60, se escribe fácilmente, pero es más difícil de llegar.
Para llegar con salud, abundancia, amor y libertad financiera se necesitan tomar muchas decisiones y accionarse todos los días. Muchas decisiones serán erradas, pero lo importante es aprender la lección y levantarte lo más pronto posible para seguir accionandote y continuar.
Para mi lo más difícil fue aprender a soltar y amarme a mí misma, como también aprender que yo soy lo más importante. Porque si yo estoy bien, todo alrededor mío estará mejor.
Aprendí a dejar ir a la gente que no está lista para amarme y que no tienen sus mejores intenciones para mi. Esto no fue fácil, pero lo tuve que hacer más de una vez y tal vez lo tendré que hacer muchas veces más.
También aunque me costó mucho esfuerzo, porque amo a muchas de ellas, pero finalmente aprendí a tratar de «no» cambiarlas, porqué yo no puedo cambiar a nadie, solo a mi mismo.
Deje de tener conversaciones difíciles con esas personas que no quieren cambiar su manera de ver el mundo y no quieren salir de su zona de confort. ¡Aprendí a respetar y a respetarme!
Lo que me costo mucho más fue soltar y aprender a querer gustarle a todos. Pero principalmente aquellos que no tiene ningún interés en mi persona y en mi presencia. Sin darme cuenta «solo» les provocaba envidias. De las cuales ellos sin darse cuenta se veían reflejadas en mi persona como el efecto espejo y veían en mí todas las cosas que aún ellos no podían resolver en su persona.
Ahora sí se quién soy y me amo a mi misma y no necesito depender de nadie para sentirme bien y sentirme amada.
Aprendí a valorarme, porqué el querer ganar el aprecio de los grupos del colegio, de viejas amistades, de tus redes sociales y aveces hasta de tu familia, es un impulso incensario que roba tu tiempo, energía, salud mental, espiritual y física.
Aprendí que después del cáncer mi lucha es por una vida con salud, abundancia, alegría. Mi interés y mi compromiso es para dejar un gran legado.
Aprendí que no todos en mi universo estan listo para seguirme a ese lugar; pero esta bien, porque cada uno tiene metas y anhelos diferentes.
Yo si se mi camino y es el de alumbrar a otros a ser su mejor versión y a empoderarse para poder empoderar al mundo.
La verdad es que no somos para todo el mundo y no todos son para nosotros, por eso a mis 60 aprendí a ser auténtica y a reconocer cuando llegan a tu vida otras personas auténticas con intereses propios. A ellos los aprecio y los valoro, porque sé lo valioso que son. Yo ya he experimentado lo que no lo es.
A mis 60 lo más valioso que tengo es mi tiempo y energía, ya que ambos son limitados y así que
me merezco quererme, valorarme, respetarme, ser mi auténtico yo, sin pedir permiso y favores a nadie. Yo tengo todo para ser feliz y tomar mis mejores decisiones. Y yo decido a quién quiero a mi lado.
Con mucha gratitud, amor y respeto gracias infinitas a todos los que me acompañaron en partes de mis primeros 60 años, gracias por su cariño y las lecciones aprendidas. Los que siguen aquí conmigo, ellos saben quiénes son y saben lo mucho que se les quiere y se les aprecia.
Gracias al universo y a Dios por permitirme llegar a mis 60 años.
Tengo aún muchos planes y muchas nuevas cimas por alcanzar. Mi «buket list» apenas empieza.
Gracias infinitas,
Adriana Rodríguez
BeBig – by Adriana Rodríguez
Adriana Rodriguez